Viajar es vivir

Una máxima de comprobada certeza, cuando viajamos vivimos la experiencia inigualable de acercanos a otras formas de vida, a la mentalidad diferente de otras culturas, al conocimiento de la historia, a la maravilla de la naturaleza y así podría pasar por largo rato enumerándoles las grandes ventajas de viajar. Quien haya viajado me dará la razón, no hay nada como sentirnos inmersos en algo nuevo, distraer la mente de los problemas cotidianos y alejarnos por un tiempo de la rutina.
¡Viajar es vivir! claro que sí, es algo que no podemos dejar de hacer tanto como podamos, nos enriquece en muchas maneras. Pero ya me dirán que viajar es prohibitivo en tiempos de crisis, que debemos ahorrar y calmarnos hasta que las cosas mejoren, eso es muy sabio y tiene su razón, pero ¿cuántas veces, y tantas personas se perdieron de cosas maravillosas, mientras esperaban el momento más que oportuno? muchas sin duda. Así que como también reza otra máxima “querer es poder”
Y una forma de querer es decidirse a hacer ese viaje anhelado, hacer un presupuesto básico, y apegarnos a él, planear nuestras actividades y dejar todo en orden para no arruinarnos el regreso con contrariedades, ¿estamos organizados? ya sabemos donde queremos viajar, cuánto nos quedaremos, y qué tanto podemos gastar.