San Petersburgo

Viajar a Rusia y visitar San Petersburgo, es un museo al aire libre, tanto al turista que la descubre por primera vez como al habitante de la ciudad que la recorre rutinariamente les une una misma sensación cuando pasean por sus calles, avenidas y malecones; una sensación de serenidad producida por toda la belleza que les rodea. Sus palacios, canales, puentes, esculturas fueron, creados, diseñados y colocados en los rincones apropiados, para extraer del alma de sus visitantes este sentimiento. San Petersburgo se descubre una primera vez y se lleva en el interior para el resto de la existencia.
En San Petersburgo no podrá perderse de visitar la Catedral de Nuestra Señora de Kazán, la cual representa una de las obras maestras de la arquitectura rusa del siglo XIX. Inspirada en la Catedral de San Pedro en Roma, fue construida por el arquitecto ruso V. Voronikhin en homenaje a la Guerra Patria de 1.812 en contra de Napoleón, levantada en el lugar de la antigua iglesia de piedra para guardar el ícono antiguo de Nuestra Se?ora de Kazan, a la cual debe su nombre.
En su arquitectura podrá apreciar la influencia del renacimiento italiano, aunque además posee elementos barrocos.
En su paseo por La Catedral de Nuestra Señora de Kazan presenta en su arquitectura una majestuosa columna corintia en forma de hemiciclo que delimita una pequeña plazoleta abierta a la turística avenida Nevsky. Las puertas de este atractivo religioso están rechas en bronce, inspiradas en las de Ghiberti del baptisterio de Florencia.
En su interior descansan los restos del mariscal Kutuzov, defensor de Moscú durante la invasión napoleónica, también conserva una serie de trofeos de guerra conquistados en la lucha contra Bonaparte. Los mejores escultores y artistas como V.Borovikovsky, V.Shebuyev, O.Kiprensky, A.Yegorov, A.Ivanov trabajaron en su decoración, pintando el iconostasio y otras partes de la Catedral.