miercuri, 29 iunie 2011

Filipinas

Los viajes a Filipinas no han sido muy populares hasta el momento. En realidad este archipiélago ha sido el gran olvidado en Asia, algo que está cambiando poco a poco aumentando en consecuencia el número de turistas. Son muchos los atractivos de este lugar, entre ellos sus playas y las muestras de la historia que han quedado durante el transcurso de la dominación española aquí.


Visitar Filipinas

Viajes FilipinasFilipinas está constituida por una nación de tipo insular compuesta por más de siete mil islas que conforman su archipiélago.

Su nombre hace referencia a la presencia española en este país, ya que se nombre deriva del rey Felipe II de España, de manera que es considerada como la única nación de Asia de carácter hispánico. Los casi cuatro siglos de colonización española han dejado muchas muestras de la cultura española, por lo que en los viajes Filipinas, se puede tener contacto con este período de colonización.

Tanto es así que al contrario de lo que ocurre en otras antiguas colonias españolas en la parte del océano Pacífico como las Islas Marianas del Norte, aquí aún se conservan muchos de los pequeños grupos de la cultura hispana que se formaron a lo largo de esos siglos de dominación, algo que se refleja muy claramente en el hecho de que la religión mayoritaria sea católica.

Además de su nombre, se ha llamado como la Perla de los Mares de Oriente, en parte porque sus más de siete mil islas parecen perlas dispersas y en parte por la belleza de sus paisajes que lo convierte en un lugar especial por lo que valen la pena los viajes Filipinas.

No obstante, hasta ahora el país no había sido un destino turístico preferencial lo que ha podido perjudicar seriamente en cuanto a su economía. No obstante, en los últimos años se ha ido reconociendo su variada e importante oferta por lo que viajar Filipinas se ha convertido en un destino más que recomendable.

Las razones de esto son muchas puesto que se promociona como la Sonrisa de Asia, tanto por sus ofertas como por el hecho de que sus habitantes son abiertos y simpáticos, además el transporte está muy acondicionado para recibir a los turistas y los paisajes y lugares de interés ofrecen una de las más maravillosas vistas de las colonias occidentales en Asia.

El clima es también una buena razón para el viaje Filipinas, ya que durante todo el año se disfruta de temperaturas agradables y calurosas aunque los expertos en esta ciencia dicen que no dispone de un patrón climático. No obstante, como regla general se puede dividir una estación seca, que va de enero a junio y una húmeda que transcurre entre julio y diciembre. La temperatura media anual de Filipinas es de 25º C, aunque hay momentos en los que se pueden llegar a superar los 40°C especialmente en el caso de Manila durante el mes de mayo. Por ese motivo el mejor momento para viajar hasta aquí es entre los meses de diciembre y mayo.


Lugares de interés en Filipinas

Manila: Algunos consideran esta ciudad filipina como únicamente una población populosa de más de diez millones de habitantes y como un lugar de entrada a otras partes y países. Sin embargo comienza a despuntar como destino turístico en sí mismo y hoy es un lugar muy recomendado para realizar un viaje en el caso de aquellos a los que les guste la aventura, gracias a su entorno y montañas en las que practicar senderismo y otros deportes al aire libre.

También es un lugar destacado para los que prefieren las grandes urbes, ya que se ha convertido en una moderna metrópoli tras la destrucción de la Segunda Guerra Mundial y en la que no obstante, han perdurado algunas vestigios coloniales de gran belleza como las iglesias barrocas de San Agustín y de Santo Domingo junto con sus conventos anexos y a los que se añaden las construcciones defensivas como las fortificaciones españolas entre las que destacan los restos del Fuerte Santiago.

Además posee varios museos, bibliotecas y centros culturales que pueden resultar interesantes para muchos de los turistas que se acerquen hasta la capital de Filipinas.

Banaue: aunque es uno de los sitios menos turísticos sus campos cultivados de arroz ofrecen una vista muy peculiar e interesante que gustará a más de un viajero. De hecho ha sido descrito por muchos como la octava maravilla. También resulta muy interesante los escalones de piedra en dirección al cielo que pueden contar hasta con una altitud de 1.500 metros y que se encuentran excavados en la ladera de una colina y que le son atribuidos a la tribu de los fugao hace más de dos mil años.

Playas: aquí se encuentran algunas de las mejores costas del mundo, algo poco sabido salvo por las listas que aparecen cada año sobre las mejores playas del planeta y en la que siempre figura una de las de Filipinas.

En la isla de Boracay que se encuentra en el extremo noroeste de Panay es donde están las playas más bellas y turísticas que disfrutar al viajar Filipinas. No obstante durante algún tiempo el auge teístico no permitió controlar adecuadamente la gestion de residuos al mar por lo que se hubieron de tomar ciertas precauciones ante el índice elevado de contaminación que presentaron sus aguas. Hoy ese problema está solucionado y se presta mucha atención desde las autoridades de que los turistas no reviertan el problema. Hoy han recuperado su paisaje idílico. También son muy famosas las playas de Puerto Galera, en la isla de Mindoro, especialmente por los turistas que desean tomar el sol o la Puraran en la isla de Catanduanes que ofrece uno de los conjuntos marinos más interesantes por sus playas y arrecifes, además de las corrientes marinas que permiten practicar el surf.

Paisajes naturales: son también muy conocidos y reputados, como es el caso de las colinas de Chocolate de Bohol o del cráter del lago Taal que se encuentra en la parte sur del país. Todos son enclaves de gran belleza muy valorados por sus cualidades paisajísticas. Tampoco hay que perderse ciudad portuaria de Cebú donde Magallanes mandó erigió una cruz como símbolo de la conquista cristiana de la isla, ni las cuevas funerarias de Sagada a pocos kilómetros de Bontoc, que son uno de los lugares de interés más importantes de Filipinas.

Vigan: se encuentra en el norte de Luzón y de esta ciudad lo más interesante es el legado arquitectónico de cierta importancia que ha quedado para demostrar el esplendor durante los tiempos de la colonia española. Estos edificios se encuentran en muy buen estado de manera que parece que se halla vuelto al siglo XVII, al viajar a Filipinas y pasar por Vigan. Además esta localidad dispone de varios museos de interés que completa la oferta cultural de la localidad.


Moverse en Filipinas

Para llegar a Filipinas lo mejor es el avión, siendo los aeropuertos principales los de Manila y Cebú donde además de tráfico internacional también existe uno doméstico ya que une estas dos ciudades con otras filipinas como Davao, en Mindanao, y Manado.

En cuanto al interior del país, lo más común es o bien hacer uso de esos vuelos domésticos o recorrer las largas distancias en autobús puesto que sólo se cuenta con una línea de ferrocarril entre Manila y Naga.

Fiestas de Filipinas

Además de el Año Nuevo que se celebra con alegría y fuegos artificiales, también son muy importantes para los filipinos celebraciones religiosas como las del 9 de enero con la Procesión del Nazareno Negro, la mayor de todo el país y en la que lo más característico es el Quiapo, una estatua de Jesús de tamaño natural en madera negra que se pasea por las calles. También es muy interesante el martes de Carnaval filipino, conocido como el Ati-Atihan, que dura tres días en la isla de Panay.



Comida en Filipinas

En su gastronomía han sido muy importantes las influencias de otras nacionalidades como la china, la malaya y la española, tomando de esta última la costumbre de los pululan, un tipo de aperitivo a media tarde acompaña de una bebidas alcohólicas. Para la cena se estilan los pinchos de carne o marisco a la barbacoa. No debe dejar escapar en sus viajes a Filipinas la oportunidad de probar estos platos típicos.

En cuanto a los platos, la mayoría de ellos son servidos con arroz y entre sus ingredientes más habituales son la carne y las verduras cocinadas con vinagre y ajo, junto con una gran variedad de sopas de arroz, fideos, ternera, pollo o hígado, entre otras muchas. No hay que dejar de probar el halo-halo un postre hecho a base de hielo picado con fruta y caramelo y cubierto de leche en polvo.

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